CATACUMBAS SAN GENNARO II - CATACUMBAS SAN GAUDIOSO

CATACUMBAS DE SAN GENNARO 

El acceso a las Catacumbas se lleva a cabo tanto por la "Plazoleta de la Basílica de la Incoronata del Buon Consiglio" de Capodimonte, como por la gran "Basílica de San Jenaro Extramoenia". Estas "Catacumbas de San Gennaro" son de una extensión extraordinaria y se presentan como un elemento único, aunque en realidad es el resultado de la ampliación y uniones de hipogeos originalmente separados. Son una verdadera y enorme "Ciudad Subterránea", en la cual, se daba "Sepultura" al "pueblo napolitano" durante un período de tiempo definido (desde el siglo II al siglo IX). En ellas se mezclaban las profundas "Creencias Religiosas", con también la "Fe" y la "Muerte". Estos lugares de sepultura se convirtieron en destino de peregrinación hasta finales del siglo XI. La oscuridad, el ambiente húmedo, el silencio, todo da un aire solemne al lugar, que os hará trasladar a otro época.

 

Nivel superior de las Catacumbas de San Gennaro 

Vinculadas con su patrón, cuyos "restos sagrados" fueron trasladados a estas enormes "Catacumbas" existentes en el Siglo V. Aunque más tarde estos restos fueron trasladados a la Catedral de Nápoles. Hasta  llegado el Siglo XI, las Catacumbas fueron el lugar de entierro de los "Obispos de Nápoles". Entre el Siglo XIII y el Siglo XVIII, fueron objeto de graves saqueos. Esta restauración de las "Catacumbas" se inició después del traslado de los restos a otro cementerio. Las "Catacumbas de San Gennaro", abarcan unos 5.800 m² en los que  vamos a encontrar unos 3.000 enterramientos en dos niveles diferentes que, a su vez, están conectados entre sí. Las "Catacumbas de San Gennaro", no solo son las más importantes de Nápoles, sino también del "Sur de Italia". 

 

Nicho con frescos de la época

Están compuestas de dos niveles no superpuestos. Nuestros primeros pasos los damos en el "Nivel Superior" en donde ya podemos atisbar que nos encontramos dentro de un "ambiente lúgubre" y a la vez que "fresco".  El guía nos va explicando como originalmente estas Catacumbas pertenecían a una familia de nobles napolitanos aunque no tardó en ampliarse a otras familias cristianas que, previo pago, podía enterrar a sus familiares. Además, fue el lugar en el que se dio sepultura al primer patrón de Nápoles, San Agripino. La oscuridad, junto con el silencio, y el respeto por el lugar en donde nos encontramos, da un aire solemne al lugar. No hay gran cantidad de luces y la iluminación es la justa y necesaria para la visita, para que nada altere la imagen original del sitio. Vamos recorriendo el "nivel superior", paseando entre multitud de nichos, sobre los que aún se conservan preciosos "frescos de la época".

 

Pila bautismal del Nivel Inferior -Catacumbas San Gennaro-

Un gran arco sostenido por dos columnas nos llevará a la conocida como la "Cripta de los Obispos", en esta Cripta tuvo descanso durante breve tiempo, otro de los "patrones" de esta ciudad, San Gennaro aunque sus restos fueron trasladados de lugar en el Siglo X. Seguimos caminando y, antes de descender al "nivel inferior", pasamos por una sala en restauración en cuyo techo se atisban más frescos en bastante buen estado de conservación. Aquí nos encontramos con un importante "pórtico" de aproximadamente unos 6 metros de alto frente a una enorme "pila bautismal" (año 762), y junto a ella se encuentra una "pequeña capilla". Desde este mismo lugar se abren dos largos y oscuros pasillos a cuyos lados podrás seguir observando multitud de nichos...

CATACUMBAS DE SAN GAUDIOSO

Altar mayor Basílica de Santa Maria della Sanità

Púlpito Basílica Santa Mª della Sanità

Nosotros al ir a recoger las entradas para poder visitar las "Catacumbas de San Gennaro", pudimos también sacar dentro del mismo lote, la entrada para visitar las bellas "Catacumbas de San Gaudioso". Estas se encuentran a unos pocos minutos andando desde las de San Gennaro, y para todas aquellas personas que elijan la misma opción que nosotros, el guía al final de la visita, muy amablemente te dice como llegar allí. Una vez en el destino, también tendrás que esperar un poco en su pequeña tienda, debido a lo que te he comentado anteriormente de las visitas en grupo, eso sí en el mismo idioma que hayas elegido al visitar las Catacumbas de San Gennaro. Menos extensas pero con más tesoros que las de San Gennaro, estas Catacumbas de San Gaudioso, son otro importante ejemplo de "necrópolis cristianas" escondidas en las entrañas de Nápoles.

 

Cripta de la Basílica -debajo las Catacumbas-

Son también sin duda, un importante destino para rememorar el arte y la historia de las primeras comunidades cristianas de Nápoles, y cómo este "subsuelo" de la ciudad es, "otra ciudad bajo la ciudad". Estas fueron excavadas originalmente por los colonos griegos para extraer "toba", un tipo de piedra blanda napolitana utilizada para construir casas y templos, y posteriormente recuperadas por los romanos, estas Catacumbas se convirtieron en un lugar de refugio y oración para los primeros cristianos en tiempos de persecución. A las Catacumbas de San Gaudioso, el segundo cementerio paleocristiano más importante después de San Gennaro, puedes acceder desde Santa Maria della Sanità, concretamente, puedes acceder a ella por la Cripta situada bajo su altar mayor.

 

Capilla y Sepulcro de San Gaudioso en las Catacumbas

El origen de este cementerio subterráneo hay que buscarlo en el enterramiento de San Gaudioso a mediados del Siglo V D. C., por lo que se convirtió, como tantos otros, en lugar de culto para los fieles; y por eso muchos también decidieron sepultar allí sus restos. Una vez dentro de ellas nos encontramos con el Sepulcro de San Gaudioso, uno de los patrones de la ciudad de Nápoles. Seguimos recorriendo su interior, y unas salas más allá, vemos como hay pequeños nichos en las paredes, donde eran introducidos los cadáveres de los monjes para que se secarán, y desde allí poder trasladarlos a su nicho definitivo. 

Monje en un nicho en las Catacumbas de San Gaudioso

 

 

Pequeños nichos para los monjes

 

 

Las Catacumbas de San Gaudioso cuentan también con exquisitas pinturas que decoran sus paredes, encuadradas en la época en que fueron los primeros enterramientos, esto es, durante los Siglos IV-V. Esta necrópolis dejó de usarse durante la "Baja Edad Media". De otra época más moderna datan otros enterramientos, fechados ya en el Siglo XVII, momento en que nuevamente se elige este lugar como zona para el descanso y reposo de los muertos entre las clases más pudientes de la sociedad napolitana (nobleza y clero). Estos nobles a diferencia de los monjes, se colocaban de otra manera bien distinta. 

Gran galería Catacumbas San Gaudioso

En las galerías cercanas a la tumba de San Gaudioso, vemos como en sus paredes hay insertadas varias "calaveras", dibujando el esqueleto debajo de ellas, o incluso también sus vestimentas. Es el aspecto más macabro de estas Catacumbas pero también el más conocido y diferencial con respecto a las otras. De esta cronología son los singulares frescos de "Giovanni Balducci", que están simulando a varios esqueletos humanos, entre la alta "Aristocracia". Lo macabro de estas pinturas no solo estriba en la representación en sí, sino también en el hueco que presentan dichos esqueletos en la cabeza y que se puede ver perfectamente en la pared, destinado para poder acoger el cráneo del difunto.

  * Para la elaboración y desarrollo de este artículo se han tenido en cuenta los datos obtenidos a través de la Wikipedia y de las propias experiencias vividas durante el viaje. (Fotografías e ilustraciones originarias de Pedro García Barbudo).